El desarrollo de instalaciones industriales suele estar orientado hacia la ubicación de las máquinas, equipos, líneas y en general elementos de producción; si bien esto es determinante, con frecuencia suelen desestimarse o subdimensionarse otros aspectos de la operación, entre ellos los referentes a la logística de atención vehicular que, al no responder a un diseño eficiente, con frecuencia se tornan crítica, generando congestión, largas filas, sobre costo e improductividad.
El centro de distribución o bodega, así como el flujo de producto, normalmente se diseña en conjunto con la planta y hay abundante literatura e Ingeniería especializada al respecto. Aquí trataremos algunos elementos referentes al diseño logístico de la atención vehicular de carga, desde una óptica diferente, considerando tres elementos prácticos que recomendamos incluir en el diseño de una operación de alto desempeño: buffer de espera, flujos de proceso y dimensionamiento de recursos logísticos.
1. Buffer de espera: son aquellas zonas donde los vehículos deben esperar para ser atendidos durante la operación. Pretender un flujo sin esperas es negar la realidad de la operación y si no se contempla, el camión estacionará en algún punto del recorrido. Fundamentalmente son de tres tipos: parqueaderos, zona o patio interno, bahías de espera. Según el layout del complejo, la dimensión y el tipo de operación la definen la ubicación y el tamaño de cada una de estas zonas de espera.
Parqueadero de ingreso. Debe cubrir la variabilidad natural de operación, debida al ciclo de arribo de vehículos; independiente de la capacidad de atención, es normal que se generen picos de llegada, más aún en sistemas viales con frecuentes cierres y restricciones de circulación. Normalmente el parqueadero está afuera o conexo a las instalaciones; cumplen además la función de permitir que el conductor regularice la documentación y el ingreso a la planta, labor que desarrolla en la oficina de ingreso.
Patio o parqueadero interno. Debe estar ubicado al interior del complejo. Permite que el vehículo espere mientras se direcciona hacia el punto de cargue o descargue. Allí se estacionan vehículos que ya están autorizados a cargar o descargar que, por diferentes razones de capacidad, ubicación o alistamiento de la carga, no se les ha definido el momento de inicio de operación.
Dependiendo del tamaño del complejo industrial, puede permitir conexión a varios puntos y flujos de vehículos, e inclusive servir de patio de maniobras para vehículos que por ejemplo deban redirigirse a otras zonas o regresar por temas de auditoría o revisiones. Al menos uno de los dos parqueaderos debe estar acompañado de una buena sala de conductores debidamente dotada.